domingo, 7 de marzo de 2010

Al alcance de un clic


    Vivimos en una era donde los medios digitales forman parte esencial de nuestra vida diaria, poseemos un ritmo acelerado a todo momento, el trabajo, la escuela, la casa, los amigos, todo el tiempo estamos buscando, pasamos la mayor parte de nuestras vidas  fuera de casa intentando respondernos quiénes y qué somos.

    La necesidad del ser humano de buscar, a mi parecer está intrínsecamente relacionada con el desarrollo tecnológico y social que hemos tenido desde el principio de los tiempos, por naturaleza somos curiosos y queremos respuestas, si no las encontramos, vemos la forma de obtenerlas y crearlas.

  Productos, servicios y medios digitales se han ido desarrollando de acuerdo al avance tecnológico que hemos tenido y las necesidades que se nos van generando, indiscutiblemente imaginar una vida sin computadora, celular, microondas, televisores y todos aquellos objetos que hacen nuestra vida más llevadera resulta imposible. Al menos el hecho de sólo imaginarlo se vuelve un panorama de miedo, una especie de película de terror donde todo lo tenemos que hacer por nuestros propios medios, comunicarnos, buscar, conocer, cocinar.

    Indudablemente la tecnología nos ha traído la posibilidad de acortar distancias, posibilitarnos la obtención de información y aprender de una manera más práctica, cómoda y sencilla. Sin embargo ¿qué tanto en realidad nos benefician los medios digitales? Pensemos un momento, si todo marcha como hasta ahora y el emporio Google abarca todas las ramas qué pretende, qué será de las bibliotecas, de los libros, las revistas y todos aquellos medios gráficos impresos que nos posibilitan no sólo la obtención de la información sino una interacción directa con ella.

    Buscar, plantea la posibilidad de poder encontrar en un futuro todo lo que necesitemos en línea, tener el acceso a libros completos, revistas y demás, no estoy tan de acuerdo en que fuera la maravilla, si bien es cierto que se abrirían las posibilidades de conocimiento de todos los que tengamos acceso a una computadora con internet donde teclear en Google nuestra búsqueda y poder, literalmente encontrar todo lo que buscamos.

    No estoy de acuerdo con la postura del escritor respecto a que Google sea lo mejor que ha existido, en definitiva es una marca muy bien manejada con ideas innovadoras que dan como resultado un buen manejo de la información y la búsqueda de la misma.

    Sin embargo no considero que sea una fortaleza para dicha empresa el ser impuntual y un tanto desorganizada al momento de tratar con los clientes, a diferencia de Yahoo el rival aparente de este buscador, que lucha día a día por ser el mejor.

    Las generaciones actuales somos hijos del Google, donde encontramos las tareas en efecto, al alcance de un clic, me pregunto si en verdad todos aquellos investigadores como el padre de la web tenían en mente que nos olvidáramos de los recursos análogos con los que ellos crecieron. Este buscador ha llegado a ser tan importante que pronto de no estar en Google no existirás, algo así como Twitter.

   Para mí, sigue siendo igual de importante un libro que una computadora, pues en ambos encontramos conocimiento y considero que en algunos momentos en “Buscar” se demerita la importancia de los medios análogos para los medios digitales, si bien es cierto que nos facilitan la vida creo que no hay nada más rico como poder sentarse a ver fotografías y poder tocarlas y ver la calidad de la impresión o nada como poner una buena película en el Dvd y poder verla cómodamente.

   Por lo tanto considero que es necesario que no sólo nos dejemos guiar por lo que el futuro nos depara y que no podemos controlar, disfrutemos de las redes sociales, Google, el acceso a todo o casi todo lo que queramos al alcance de un clic pero también invito a revalorar lo que nos rodea y a darle la misma importancia que le damos a lo digital.